Cuando un bebé nace un mundo nuevo parece aparecer ante nuestros ojos al mismo tiempo que el mundo anterior parece desajustarse como un rompecabezas que volvemos a iniciar. Aquello que antes era lo más urgente, pasa a ser bastante prescindible, y lo que jamás se nos pasó por la cabeza toma una importancia vital. Nos quedaríamos horas y horas viendo como cambian los gestos de su cara…
¡es increible!
Personalmente, me encantan este tipo de sesiones por la paz y la alegría que me transmiten.
Sé por experiencia que los primeros momentos con tu bebé son muy especiales y muy íntimos, al fin y al cabo se trata de, poco a poco, ir creando una relación con esa personita, ir conociéndola, e ir presentándote. Pero también sé por experiencia que el recuerdo de una sesión fotográfica es algo que merece la pena tener. Por ello planifico muy a medida las sesiones para bebés, adaptándome a lo que ese pequeño ser necesita y a vosotros también, papás y mamás, por supuesto. Trato de realizar sesiones cortas y tranquilas para molestaros lo mínimo posible, y en el momento en el que os encuentreis todos más predispuestos a ello.
Contadme vuestro caso y seguro que encontramos el momento adecuado.